Casi 60 000 infecciones por COVID-19 fueron registradas en Suiza durante un período de cuatro días que abarca el fin de semana de Año Nuevo, un número significativamente mayor que en el período de Navidad, pero hubo menos hospitalizaciones y muertes, informó el lunes la Oficina Federal de Salud Pública (OFSP).

La dependencia precisó que el lunes había 57 387 pruebas positivas de las 96 horas anteriores. En el mismo período de la semana precedente, unas 36 261 personas dieron positivo por COVID19. El promedio de siete días de nuevas infecciones aumentó un 60% (14 933).

Sin embargo, hay indicios de que la variante Ómicron, actualmente dominante, es menos grave que la Delta. A pesar de un mayor registro de infecciones, el número de pacientes con COVID-19 hospitalizados se mantuvo estable durante la última semana, situándose en 1 683 el lunes. Las muertes registradas en los últimos cuatro días (57) fueron ligeramente inferiores a las 69 anunciadas hace una semana.

Las autoridades sanitarias siguen preocupadas por el número creciente de infecciones. Un aspecto particularmente inquietante es la disponibilidad de personal en los hospitales.

Hasta 2 500 militares están listos para intervenir en apoyo de las autoridades sanitarias en el tratamiento de los pacientes en los hospitales, aplicación de vacunas y en operaciones de logística.

Mientras tanto, la mayoría de los cantones suizos ha seguido la recomendación gubernamental de reducir el período de cuarentena (de 10 a siete días) de las personas que hayan estado en contacto con alguien que dio positivo. Diversos cantones también han comenzado a hacer citas para la vacunación de niños desde cinco años.

Un poco más de dos tercios de la población ha recibido las dos dosis de la vacuna y alrededor del 25%, el refuerzo.

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