El gobierno suizo anunció el incremento, para 2017, de mil visas para trabajadores no comunitarios, con lo que el total ascenderá a 7 500. La medida obedece a los reclamos de empresas y cantones que agotaron este año las cuotas que les fueron atribuidas de mano de obra extranjera especializada.

El número de permisos “B” (residencia) pasará de 2 500 a 3 000, y el “L” (estancias de corta duración), de 4 000 a 4 500, precisó el Consejo Federal en un comunicadoEnlace externo.

Las autorizaciones habían sido reducidos en 2016 a 6 500 (8 500 en 2014) como consecuencia de la aprobación, en febrero de 2014, de una iniciativa sobre la inmigración de masa, promovida por la Unión Democrática de Centro (UDC/derecha conservadora).

Como resultado de ese decremento, los permisos para la contratación de extranjeros especializados resultaron insuficientes para diversas empresas y cantones.

El ministro de Economía, Johann Schneider-Amman se pronunció recientemente por un retorno a las 8 500 autorizaciones. En su opinión, una medida semejante sería una señal política positiva para la economía.

Los mil permisos autorizados de manera suplementaria serán acordados en función de las necesidades, precisó el Gobierno y añadió que el incremento fue decidido en virtud de las necesidades persistentes del sector económico de especialistas, del nuevo artículo constitucional (derivado de la votación del 9.2.15) sobre la inmigración, así como de los debates en curso en el Parlamento.

Advirtió igualmente que se mantendrá la prioridad en la ocupación de los puestos de trabajo para las personas residentes en Suiza.

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