Su trabajo es promover la cobertura médica universal, establecer normas y coordinar la respuesta mundial a las emergencias sanitarias. Desde finales de 2019, cuando surgió un nuevo coronavirus, la Organización Mundial de la Salud (OMS) se ha visto en el punto de mira, y –algunos– la utilizan como chivo expiatorio por el fracaso a la hora de contener la COVID-19.   

Carlo Pisani

A finales de mayo –con motivo de la reunión de la Asamblea Mundial de la Salud, su órgano de decisión–, los medios de comunicación pondrán de nuevo el foco en este organismo con sede en Ginebra. Con carácter prioritario, se abordarán las propuestas para mejorar la preparación en caso de emergencias y garantizar un acceso equitativo a las vacunas.   

¿Pero en realidad cuánto sabemos acerca de la OMS? ¿Quién la dirige y cómo se sufraga su trabajo? ¿Qué ha conseguido la OMS desde su fundación en 1948, y qué ha podido hacer –o no– para responder a la pandemia de la COVID-19? 

Traducción del inglés: Lupe Calvo