En respuesta a la decisión del Banco Nacional Suizo de flexibilizar su política monetaria, el Banco Migros, perteneciente a una de las principales firmas minoristas helvéticas, anunció este viernes un decremento de un octavo de punto que sitúa en 4 ¼ por ciento sus tasas hipotecarias variables.

"Esta decisión se justifica por el contexto bursátil y financiero actual", explicó la institución bancaria en un comunicado en el que precisa que la reducción es aplicable de forma inmediata para las nuevas hipotecas, mientras que para los expedientes en curso entrará en vigor el próximo 31 de mayo.
Sin embargo, el recorte del principal tipo de interés anunciado este jueves (22.02) por el banco emisor helvético no tendría repercusiones inmediatas en las tasas hipotecarias de las instituciones bancarias cantonales, según diversos especialistas.

Algunos estiman que será necesaria una reducción más acentuada por parte del Banco Nacional Suizo (BNS) para que afecte las tasas variables. Según Christian Bohner, consejero económico del Banco Cantonal de Vaud, "el movimiento del mercado es todavía inferior al 0,2 por ciento decidido por el BNS".

En opinión de Jean-Michel Deschenaux, responsable del área de crédito del Banco Cantonal de Neuchatel, la decisión del BNS representa en primer lugar una reducción técnica carente de significación.

En los meses de septiembre y octubre se produjo una situación diferente caracterizada por una muy clara tendencia al alza.

"Hoy domina la estabilidad y no hay inflación", precisa el especialista y añade que, a corto plazo, es imprevisible alguna eventual incidencia sobre las tasas hipotecarias.

Jean-Bernard Denervaud, secretario general del Banco Cantonal de Friburgo, aduce a su vez que "esa baja es un indicio de estabilización y de modificación de tendencia", pero aún es muy pronto para hablar de la posibilidad de que las tasas hipotecarias vayan a disminuir.

Signo positivo

Claude Van Houteghem, responsable del sector de divisas y de la tesorería del Banco Cantonal del Jura, reconoce que, aunque sorpresiva, la decisión del banco central suizo constituye una medida preventiva para evitar una desaceleración de la economía.

Asimismo, para Pierre Iseli, de la directiva del Banco Cantonal de Ginebra, la baja no tendrá incidencia sobre las tasas hipotecarias a corto plazo, pero es un signo positivo para la economía.

swissinfo y agencias

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