El director y jefe ejecutivo de ese poderoso grupo helvético, Nicolas Hayek, lanzó un feroz ataque contra el mercado de valores. Se refirió en particular a la bolsa de Zúrich a la que acusó de negarle una evaluación justa a las acciones de su firma.

En el reporte anual de actividades de Swatch, dado a conocer este miércoles, Hayek calificó de "superficial" el comportamiento del mercado suizo de valores. Aseguró que la especulación en general ha llevado en algunos casos a situaciones absurdas y a la distorsión del mercado internacional, lo que puede ser comparado a un juego de ruleta.

Hayek dijo que, sin embargo, la conducción del Grupo Swatch ha sido "absolutamente certera" por lo que a corto y largo plazo la situación de los valores del grupo mejorará gradualmente para lograr una cotización en el nivel que realmente les corresponde.

El grupo, con sede en Basilea, tiene 18 ramas que incluyen las marcas Breguet, Blancpain, Omega, Longines, Tissot y Swatch.

El directivo denunció la tendencia del mercado de valores a comparar al Grupo Swatch con firmas de lujo, alta tecnología u otras, cuando su esencia es otra y se basa en la diversidad.

Destacó que en los últimos dos años las tendencias del mercado internacional de valores han sido incomprensibles para muchos empresarios, especialmente para los innovadores y las compañías bien establecidas.

Hayek explicó que cuando los especuladores compran acciones y buscan venderlas con un buen provecho días o meses más tarde, llevan el valor de las cotizaciones de compañías modestas y estables a niveles irreales.

Durante el año 2000 el Grupo Swatch registró un nuevo récord con ventas superiores a los 4.000 millones de francos. "Es el más alto nivel alcanzado por el Grupo Swatch y probablemente el más amplio en el mercado relojero mundial", subrayó.

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